Por suerte a la putita le gusta el dinero
Llega a pensar que lo han estafado cuando entra en la casa y se entera, que ahora tendrá una hijastra. Las cuentas no le dan; serán dos bocas que mantener y no solo una, que fue el trato inicial. Sin embargo, luego de evaluar bien la situación, antes de salir corriendo, se da cuenta que por suerte, a la putita le gusta el dinero. Y eso ya es razón suficiente para quedarse. O lo que es implica. Porque luego que le da unos billetes, ella termina comiéndole la polla y en el momento correcto, ya le estaba dando una follada. Un buen rato paso clavándola y la jovencita gozando.