El vecino es casado pero siempre acepta follarla
La vida es dura para una mujer que acepto convivir con un hombre por convención social del matrimonio. Ella pensó que hacer lo mejor para el mundo, sería lo mismo que hacer lo mejor para ella y luego descubre que solo ha regalado lo más valioso de su vida. Sin embargo, en la casa de al lado tiene un consuelo. Porque el vecino es casado, pero siempre acepta follarla porque es una rubia dedicada a hacer buenas mamadas de polla y luego que la ve firme, entonces hace que su coño termine todo el trabajo. Y esas buenas folladas es razón suficiente para clavarla.